Tres gigantes pasos

BUENOS AIRES  Se fue la primera final de la Copa Libertadores y Boca sacó una diferencia casi decisiva para lo que se viene. Los tres goles conseguidos en el choque de ida dejan a Boca a un paso de la obtención de su sexto título continental.

De no ser por otra absurda decisión de la Conmebol, la de cambiar las reglas para la final (el gol de visitante no vale doble en esta instancia como sí ocurre en el resto de la competencia), Boca casi estaría dando la vuelta olímpica.

¿Mereció Boca sacar semejante diferencia? No, porque el partido fue mucho más cerrado de lo que marcan las cifras, incluso cuando Gremio se quedó con un hombre menos, a los 13 del segundo tiempo.

Gremio jugó mucho mejor de lo que marca el resultado y no obtuvo algún premio a su buena actuación porque falló en algo decisivo: en los últimos metros del área. La convicción que tuvo Boca frente al arco fue inversamente proporcional en el caso de los brasileños, que generaron varias chances ante Caranta, pero las fueron despilfarrando una a una.

Boca se quedó con la primera final, por una cifra más que auspiciosa. Y la ventaja le permite decir que ya tiene tres cuartos de título en el bolsillo.

No hay dudas de que Gremio está con la espalda contra la pared y escasísimo margen para el error.